La sala que entró al jardín
Otra pequeña gran obra que dio mucha felicidad a mi clienta y amiga, y a mí como diseñadora.
Se trata de una cabaña de madera que fue creciendo con el paso del tiempo.
La sala de estar resultaba pequeña y oscura, a pesar de estar rodeada por un bellísimo jardín.
El sueño de mi clienta era poder reunir muchos amigos y tener un rincón de fuego, para los largos inviernos patagónicos.
La propuesta fue desmontar una pared para integrar lo existente con la nueva ampliación, dejando una de las viejas ventanas como una barra para poner el ordenador y un pórtico con la estructura de madera existente, como conexión y paso.
Cerramos con ladrillos y piedras, pero básicamente con un cerramiento de madera en L, con cristales térmicos, lo que generó una expansión y un contacto con el verde, que fue como meterlo en la casa.
Lo techamos con una pseudo lucarna a dos aguas que intercepta al techo existente.
Aprovechando la obra, hicimos un nuevo acceso principal, delante del anterior, que funciona como acceso - invernadero y de transición, para amortiguar el frío.
Y en la planta alta, en una de las habitaciones que tenía un techo con pendiente a 60º, levantamos una lucarna que permitió poder transitar por esa "pared" y darle mucho aire y luz.
Una serie de pequeños desafíos que aportaron mucho a la casa existente.
Agradezco me hayan propuesto desarrollar la intervención como proyectista. Un placer.
Agrego también una maravillosa artesanía que unas amigas le regalaron y materializaron por su cumpleaños, un suelo "cortafuegos", protector.
Gracias de nuevo.
tan Feliz Amiga, tanto soñado y ahora plasmado, En Mi Realidad.......Gracias por acompañarme en estos años, además de Ser Amigas....
ResponderEliminarRecién lo veo!! Gracias, vos y el Bolsón en mi alma....sitio al que eligió llegar mi hijo, entre otras cosas, siempre presente
Eliminar